lunes, 6 de junio de 2016

Un hombre de 26 años.

Estar un poco roto y descocido es parte de la vida, jamàs volvemos a ser los mismos, y de hecho estar un poco a la perdida es parte inseparable de la capacidad de ser felices, de la primordial capacidad: la de vivir.
Yo creo que fue una cita conmigo mismo, no podía con el trabajo, con la familia, con mis amigos, con aquella persona que ya no esta, no podía ni con el alma rota ni con los pedazos de corazón .
No fui a otra cosa que por mi diploma de la ultima profesión que aprendí ( y que aseguro no sera la ultima que aprenda) , tenia todo el día para estar conmigo mismo para aislarme en medio de las millones de personas (cucarachas y ratas incluso que podemos parecer en ese monstruoso territorio) hundirme en la muchedumbre, perder personalidad y sensibilidad para que el proceso de auto sanación comenzara.
Yo creo que fue Loli, que fue Cerati, que fue Fito, que fue Dani, los que repararon mi corazón. Yo creo que fue Benito (Taibo) y que fue Riso, quienes curaron mi alma.

Re- Descubrí que un hombre de 26 años puede convertirse en un cerrar y abrir de ojos en un niño de seis, que enloquece con un helado de chocolate con galletas oreo y jarabe extra chocolatoso, que un hombre de 26 años aun tiene ese gusto del adolescente de 16 años que moría por las mismas hamburguesas de Chillis.  Que un hombre de 26 años sigue amando con locura el Sprite y los Camel.
Que el hombre de 26 años sigue amando con locura el bienestar perruno, que el parque Rio de Janeiro me regalo nueve nuevos amigos perrunos hermosos, que me regalo palomas y pájaros cantores que parecían estar en habitat, y que me incomodo al ver a una pareja con corazones juntitos y amados, que me enseñaron a la vez que tener 70 y estar al lado de un tipo de 26 años con el corazón roto es también muy hermoso, que ese tipo llore al sentirse tan vivo, también es hermoso. Que ese hombre regrese esa misma noche a su pueblo blanco y regrese a su segunda casa (primera en nivel bohemio) sin la necesidad de ponerse hasta el culo de rones también es hermoso. Que tomar una tongolele de ron con un pequeño amigo y hermano es un regalo de Dios, que te atiendan amigos cantineros es un beneficio que no cualquier bohemio tiene.  Que ese hombre de 26 años llegue a casa con unas ganas locas de abrazar a su jefa, como cuando lo hacia a los 4 años también es una parte hermosa de vivir.

No estoy bien, no estoy mal, la herida esta ahí, ni cicatrizada, pero estoy vivo, aun duele, y dolerá el tiempo que sea necesario, hay tantas cosas que quisiera decirle y saber, que quisiera abrazarle y besarla, que quisiera no haberla conocido jamas para nunca haber terminado así. Pero la bomba ya estallo, y no hay nada que hacer, rehacer lo caído, no suplirlo, construir de nuevo a mi mismo.
No fue que no me guste las noches bohemias, lo que pasa es que cuando los dolores son del alma y el corazón el alcohol sirve para idiotizar un poco la mente, y por unos momentos dejar de sentir y pensar, llegar a cama sin la necesidad de sentir tristeza ni melancolía, sin la necesidad de pensar millones de cosas que hice, que no hice, que pudieron ser, que pude haber reparado. Pero el mar de botellas se vuelve perdición si uno lo ve como una salida y no como lo que es: una aventura.

Si alguna vez lees esto, espero sepas que hablo de ti, que te ame ,te amo y te amare, que estoy roto y perdido , pero en paz porque así ya no te haré màs daño, porque así estas a salvo de nuestro amor, y que estemos bien ambos por separado, es por mucho, mejor que estemos masacrándonos juntos.

Con todo el cariño , con amor , con bendiciones y respeto te envió un beso en tu alma, un abrazo a tu corazón, un perdón a ti. Y un de nada a tu bienestar. Para ti Mariana.

Kevin

martes, 1 de marzo de 2016

Mi madre, Leo y miércoles de ceniza

"¡Ganò el oscar Leo!... ¡Lo ganò!"
Ayer me recibía mi jefa con esa noticia, y no, mi madre no cometió el delito de celebrarlo como si fuera un triunfo patriótico, democrático,  evolutivo o extravagante. Mucho menos se fue al ángel a emborracharse y tratar de celebrar por un ganador, que por mucho no tiene nada que ver con este enfermo país y piruja sociedad.

El hecho es que celebraba el triunfo de un actor, el cual era protagonista de la penúltima cita amorosa (no romántica) y cinefila que tuve con mi progenitora. Después de tenerse que chutar toda la franquicia Marvel y DC por capricho de su hijo menor, le hizo darse cuenta que "The Revenant" era una joya; de hecho, ha sido de las pocas películas en las cuales les ha prestado interés y no se ha quedado ligeramente dormida (no puedo presumir eso de la franquicia Marvel y DC, creo que mi jefa es de las pocas, poquísimas personas que le vale un cacahuate la guerra civil de el Cap y Stark) .

Esas citas de cine con mi jefa las inicie en mi amada segunda ciudad patria: Cuernavaca. Cada quince días mi jefa le iba a dar una vuelta a su mocoso para ver que no estuviera haciendo mucho desmadre y que no estuviera excesivamente encerrado, malnutrido y alcoholizado. Eran dos bellos días de visita, comíamos sushi en la plaza, y obviamente tocaba cine, yo amaba esas citas con mi mama porque podía invitarle completamente el cine, debido a mi recurrente buena administración económica, y le podía compensar con un poco de entretenimiento y convivencia todo el infinito amor que ella me entrega desde el primer instante de mi existencia.

Y no, no era una cita en la cual me sintiera ridículamente incomodo o pendejo, ni en la cual tuviera que soportar a una perfecta desconocida de la cual no recibiría nada mas que maltrato sentimental y desperdicio económico que culminaría con una pendeja y desgastada etiqueta de "ExNovios".

Sabia perfectamente que era la mujer de mi vida, la que me dio la vida, la que me ama borracho, sobrio, quemado, enojado, de buenas y de malas. La mujer a la cual le gusta y no le gusta reconocer que somos tan parecidos , orgullosos, tercos, dignos , necios que por cualquier cosa chocamos hermosamente en un amor intenso de una madre y un hijo.

Pasaron muchos, en serio, muchos meses para que esas citas se reanudaran, y "The Revenant" ha sido por mucho una de las veces màs memorables por el hecho de que le haya gustado la película a mi jefa. Cosa que no tiene porque desvalorarse ya que, como a cualquier madre, y mujer, tiene un gusto bastante riguroso, difícil y a veces imposible de satisfacer. En las citas es como si llevara a una bella dama que por azahares de la vida no pudo tener esas citas con su pareja. En cada cita es el turno de que , aunque sea por poco rato me convierta en un caballero y lleve a la dama màs hermosa e importante de mi vida a una cita de madre e hijo puntual y gustosa al cine.

Toda esta situación y esta temporada me hace recordar los seis años consecutivos de pasar el miércoles de ceniza en Cuernavaca al lado de mi jefa. Era una practica que se convirtió en ritual, que se quedo en mi corazón y en mi memoria, y espero que en la memoria de Dios antes de considerar mandarme al infierno. Amaba que me echaran esa ceniza en la catedral, adoraba ir de su brazo y quedarnos a la celebración eucarística, todo a su lado. Es el tercer año que pasa después de esos miércoles en Cuernavaca, daría mi vida por ver y sentir nitidamente de nueva cuenta esos días allá con mi jefa. Sin embargo la tengo acá a mi lado, estoy pensando en escribirle todo esto, no se si algún día lo lea, pero con tenerla acá me siento feliz, con escribirlo a escondidas, porque me da pena mostrar mis sentimientos, con eso basta. Con una jefa a toda madre como ella, con eso me basta y sobra.

Te quiero jefa.



viernes, 19 de diciembre de 2014

Mejor

"Mejor"
Dedicado a Azul Violenta

Alguna vez quiero ser lo mejor de tu vida,
no sè cuándo ni cómo sucederá
y aquí estamos sangrando de heridas
que no dejamos cerrar
no sè como hacerte entender lo que siento
y borrarte las verdades que piensas
que no me conocen, que son tuyas, no reales.

Alguna vez esto fue lo mejor
no sè cómo explicar la sensación
de algo que quieres pero no es tuyo,
y quizá jamas sea tuyo, así, tù no eres mía.

Alguna vez seremos lo mejor, juntos,
la más bella pareja, de la mano
podremos huir lejos, ser uno mismo;
antes debemos huir de nosotros mismos
y de este deseo de joder todo y volverlo gris.

¿Cómo quitarte la estúpida imagen que tienes de mi?
si me encanta tu forma violenta , pero una masacre eterna
no nos va a unir, nos vamos a joder si seguimos así.

Alguna vez seremos lo mejor
sentir aquello que nos ha faltado
resulta innecesario reclamarnos y lastimarnos
resulta tonto sentir que seré lo mejor de tu vida
planear, sentir, creer que juntos seremos.

Alguna vez seremos lo mejor.
y nadie nos podrá separar
pero,¿ por qué hablar de esto?
Si estas en brazos de alguien más.

Alguna vez seremos lo mejor,
alguna vez quiero ser lo mejor de tu vida,
sin importar nada.

Kevin Gòmez Muñoz
Escrito el 18 de Diciembre 2014.
21.57

martes, 23 de septiembre de 2014

Cambiando adioses

Hace no mucho, como por el 13 de Septiembre, anduve re-contentote, celebrando el primer aniversario de mi poema favorito "Trueque Injusto" de mi querida y admiradisima amiga Jez Paredes. Debo reconocer que no me lo sé de memoria, y he de prometer que pienso memorizarlo y recitarlo todas las veces que se de la oportunidad. Hay una parte hermosa que dice "te cambio un adiós por un beso", (no pienso citar más porque Trueque Injusto es una joya que merece ser leída completamente); en fin, a pesar de que es un verso hermoso jamás había comprendido bien el sentimiento que contiene entre las palabras.

El jueves pasado acompañado de mis hermanos Javier y Oscar fui a ver a Jorge Drexler al Metropolitan, un concierto que fue mágico, hermoso. Después agarramos parranda en el Tenampa y acabamos llenos de amigos universales: un coreano, un israelí y un judío. El coreano hizo un gesto de hermandad universal regalándome una cajetilla de cigarros imposibles de fumar pero coreanos al fin y al cabo. Fue un viaje perfecto, tuve una sería depresión en mi regreso al pueblo blanco, no podía renunciar a la felicidad de ese jueves. Pero el concierto y los amigos internacionales no lo eran todo, también me hice amigo de un perro callejero que en otra ocasión hablaré. La parte más romántica del jueves y del viaje fue en la mañana, en donde por fin conocí a Adri. Pasamos juntos toda la mañana, a besos que comenzaron siendo tímidos e inseguros, pero fueron mutando hasta parecer sanadores y llenos de átomos de felicidad.

Pasé cerca de cuatro horas a su lado, a sus besos, a su mano, a nuestros abrazos, la sensación que deja la dopamina después de tan lindos besos es realmente una felicidad, pequeños instantes como el concierto , el tenampa y el perro, que te hacen diferenciar lo cotidiano, lo decadente y sentirte pleno, instantes, que son un complemento de todo lo malo. Sin ese contraste entre bueno-malo, felicidad-desdicha, no seriamos capaces de vivir como se debe, ni tampoco podríamos identificar lo hermoso de lo mierda.

Regresando después de este par de párrafos al tema central, estaba dejando a Adri en la estación del metrobus, y en el último instante juntos , a punto de despedirnos un rayo luminoso llegó a mi mente, el recuerdo de los versos de "Trueque Injusto", era ese el trueque del que hablaba, era ese el momento para vivirlo, para besarla, para citar a Jez. Simple, sereno, le dije "te cambio un adiós por un beso", y sellamos con un beso lo que pudo haber sido un adiós. Dios bendiga a Jez Paredes por ser capaz de plasmar en letras tanta hermosura, por ser una mujer visionaria y mágica. Es la primera vez, y Adri la culpable de tan hermoso momento.

No sé cual será el futuro, la extraño mucho, un chingo. La sensación de sus labios, nuestras lenguas librando batallas de amor, el sabor de su saliva, y ese veneno adictivo de una especie de labial sabor fresa que provocaba un instinto asesino de labios en mi y quedaba con ganas de verdaderamente arrancarle los labios y literalmente comérmela a besos. Esas pequeñas mordidas mutuas que te hacían saber que los besos eran reales y no un sueño.

Algo de mi se quedó en DF, una parte de mi corazón que esta en manos ahora de Adri, algo de ella se quedó y se vino conmigo, una parte de su esencia, no es un sentir de pertenencia sino de libertad y verdadera elección. Sin pertenecerle soy suyo, sin pertenecerme es mía, en un sentido libre y relativo, en una parte asignada mutuamente, reciproca.

Aprendí a disfrutar el momento, sin acabarme por el pasado, sin sufrir por el futuro, se puede llegar a perder cosas muy valiosas si no se vive el presente plenamente.

Queda todo, podría ser un hermoso amor, podría acabar, podría acabar mal, podríamos enfrentar el mundo juntos con el pretexto del simple acto de que dos seres humanos se aman, puede pasar todo para bien y para mal, en un largo camino que entre los dos podemos construir. Todo se puede. Pero es necesario vivir el presente, el amor se construye cada día, cada minuto, cada instante, con cada acto, así como algún día una pequeña y mágica amiga escribió "Trueque Injusto".

Kevin G. Muñoz
23 Septiembre 2014.
Taxco, Guerrero, México.
22.07 hrs.

sábado, 6 de septiembre de 2014

"Decir que murió es una mentira"

"Decir que murió es una mentira."
Dedicado a Gustavo Cerati

Hoy anunciaron el fallecimiento de Gustavo Cerati, no hace falta hacer presentación alguna, solo diré que es mi Dios en el aspecto musical, lo máximo.

Decir que murió es una mentira. No existe muerte alguna cuando llevas a alguien en el corazón y en la mente, en la carne, en la misma alma. Cerati es parte elemental en mi vida, me ha acompañado en los momentos más felices y trágicos; directa o indirectamente Gustavo tocó profundamente la vida de millones de personas con su voz, su música, sus letras, sus acordes mágicos en guitarra, su personalidad arrolladora. Deja un legado imborrable en mi vida. Yo no despido a Cerati, porque lo llevo dentro de mi.


El primer contacto con la música de Cerati fue a través de Jaime "Jimmy" Porcayo Loza, un gran amigo y hermano de mi mejor amigo Javier Porcayo Loza. Jimmy me recomendó "Ella Uso Mi Cabeza Como Un Revolver" para sanar algunos pensamientos sombríos amorosos con mi primer amor (calculo por tiempos y fechas que fue ella) . Al m omento de escucharlo quedé impactado, una voz potente, nítida, profunda, acordes e interacciones entre instrumentos que no sonaban a nada parecido más que a Soda y a Cerati. Ese fue el arranque para mi amor más grande musicalmente hablando: Cerati.

Cerati me ha acompañado en mis momentos de perdidas, fracasos, desamores, y siempre tenía algo brillante que decir, reconfortaba mi alma. Las lagrimas pesaban menos con Gustavo cantando "Zona de Promesas" , podía acabar con todo, e incluso, sembrar un poco de esperanza y alegría en ese momento gris.

La espera entre el lanzamiento de un disco y otro , parecía ser eterna, y sus mayores admiradores nos dejábamos sorprender, Gustavo con su enorme talento no solo nos sorprendía, Nos enamoraba más y más con su contante evolución artística.

No hay una mejor canción para hacer el amor que "Ciudad de la Furia", tener a una mujer que amas desnuda, poseerla, estar dentro de ella; y Cerati armonizando el momento es realmente sexual y erótico, una fantasía que pude cumplir a mi antojo. "Me dejarás dormir al amanecer entre tus piernas..."

Recuerdo la primera vez que vi a Cerati en vivo, fue en México DF en el Auditorio Nacional, en el arranque de la gira "Ahí Vamos" en 1 de junio de 2006. La garganta se me cerró, mis ojos se llenaron de lagrimas, la emoción de ver a mi ídolo en vivo por vez primera es algo milagroso, divino.

Lo vi en Ahi Vamos en Auditorio y Palacio de los Deportes, tuve la fortuna de verlo en 2007 con Soda en Foro Sol ante más de 55,000 personas que al igual que yo vibraron con el milagroso reencuentro de los Soda. La última vez que lo vi fue en Auditorio Nacional presentando "Fuerza Natural" tuve el honor de asistir acompañado de mi amigo y hermano Javier Porcayo. En todas las ocasiones mis ojos seguían llenos de lagrimas de felicidad, en nudo en la garganta se transformaba hasta el punto de quedarme afónico de tanto cantar con Gustavo ahí, en vivo. Esos pequeños instantes son felicidad pura.


Tengo un ritual, cada nuevo año, en el minuto cero pongo un DVD de Gustavo o de Soda en algún concierto, no hay una mejor manera de iniciar el ciclo nuevo que con Gustavo cantando y deleitándome con su bendita música.

Vino la etapa difícil, y siempre desee que Gustavo regresara y volviera a hacer un nuevo disco, con toda mi alma desee volverlo a ver en un concierto. Rece por él, por su mejoría, por el milagro. Prometí como una especie de "Manda" no volverme a morder las uñas, hábito que tenía muy arraigado, con tal de su mejoría. No pienso volvérmelas a morder, en todo lo que me reste de vida.

Cerati es un Dios musical, mi ídolo, mi máximo. Hoy ya hay un rumbo definido y la etapa crítica de su salud por fin terminó, siempre con esperanza pero no puedo fingir estar de acuerdo o satisfecho con este "final".

No hay para mí, nadie más grande que Cerati en la música, así como Dios para mi religión, así como el Che para la revolución, como el Gabo para la literatura. Yo no puedo decir que lo despido porque Gustavo esta siempre presente en mí; en cada sonrisa, en cada lagrima, en cada borrachera, en cada vez que hago el amor, en cada beso, en cada adiós.

Gustavo Cerati me ha dado con su arte sensaciones invaluables que estarán conmigo hasta mi último respiro. Yo no puedo decir que murió, es una mentira, Cerati se transformo en materia, en energía, amor, música que viajará por todo el universo y estará presente en la vida de millones de admiradores suyos, como yo.


Mi ser entero esta triste por la perdida física, pero sé que Gustavo vive eterno en mi corazón, en mi alma, en mi mente.

¡Gracias Totales Gustavo Cerati!  ¡Te Amo Carajo!

Kevin Gómez Muñoz
Taxco Guerrero, México, 4 de Septiembre 2014. 23.00 hrs.


martes, 19 de agosto de 2014

"Tu Recuerdo" (uno)

Tu recuerdo es incomodo como la lluvia
asecha en pleno calor del verano
interrumpe la paz de mi corazón
a gritos destrozas mi mente, te recuerdo
me acuerdo de los besos y nuestros amores.
Algunas noches te extraño, enfermo,
en la fiebre de mi cama y tu ausencia.

Tu recuerdo es nostalgia corrosiva
acaba con mi tranquilidad, perturba,
hiere a la felicidad de mi día a día
tu recuerdo es veneno para mí
siento como se pudre mi corazón
me invade tu nostalgia, y te extraño.

Tu recuerdo a veces es un sueño
ya en secreto, voy y te busco
te beso, hacemos el amor sin fin
volvemos a ser nuestros, pero felices
no como ahora que al vernos
y tras todas las heridas, nos odiamos.

Tu recuerdo a veces es felicidad,
es locura, es amor, regocijo de mi corazón,
pensar en todo lo que te entregué
y todo lo que provocaste, sentirte,
amarte con todo mi ser, recordarte.

Pasa el tiempo y en la nostalgia
se borra todo lo malo, queda lo bueno
queda nuestro amor, que fue,
y que ahora es tu recuerdo.

Kevin Gómez Muñoz
(Escrito el 13 Agosto de 2014)
(Taxco Guerrero México)

lunes, 28 de abril de 2014

Sigue provocandolo

No quisiera caer en el lugar común donde todos caen: añorar a aquel que acaba de "morir" hacerlo un santo, una leyenda, lamentar su perdida, actuar como si fuera entrañable y como si fuera una perdida irreparable.
No voy a decir que he leído todos sus libros, ni me tomare fotos afuera de Bellas Artes con su fotografía, no pienso prostituir este acontecimiento, prefiero escribirle a mi modo, saludarlo en el alma, como el Gabo lo merece.
Hace días estaba en el gimnasio, una rutina que tengo a diario, no por egocéntrico, sino por neurótico, un día sin gimnasio es un día de perros. Estaba ya en la ultima etapa, la de ejercicio cardiovascular y el televisor estaba en un canal de noticias, en la hora del noticiero matiné, pasaron a los presidentes de México y Colombia, diciendo una bola de estupideces, como si ellos hubiesen sido grandes amigos del Gabo. Pero terminando aquella nota del homenaje que le rindieron en Bellas Artes, continuo un reportaje de una despedida simbólica que le hicieron en su tierra natal: Aracataca. Un gran número de personas caminando con luminosidad a lo largo de las calles, con una enorme vitrina llena de mariposas amarillas, para llegado el lugar del memorándum, dejarlas en libertad, a todas y cada una de ellas, un homenaje simbólico, iconico, de esos que el Gabo merecía y de esos que le hubiese gustado presenciar. 
Bellamente quede impactado ante tal homenaje, se me erizo toda la piel (piel de gallina como comúnmente se le denomina a dicho fenómeno) igual que cuando termine de leer "Cien Años de Soledad" por primera vez. El Gabo sigue provocandolo en cada una de las personas que toco en el corazón, alma, y mente con su gran don de escribir. Eso es el Gabo. Celebremos al Gabo, como se debe, originalmente, dejándonos de pendejadas y adentrándonos, haciendo realidad el realismo mágico.
El Gabo no se crea ni se destruye, solo se transforma.
Infinitas Gracias Gabo!!!!
Kevin G Muñoz